Panamá: Sarigua ya no es un desierto
El Parque Nacional Sarigua ha dejado de ser un desierto gracias a un programa de recuperación natural que se desarrolla en sus 8 mil hectáreas de terreno, ubicado en Parita, provincia de Herrera.
Cuentan los moradores del área que Sarigua, no es ni remotamente lo que era hace 20 años atrás. Tenía todas las características de un desierto, lo que causaba curiosidad entre los visitantes.
Fue declarado en 1979 como área protegida, y en 1984, como Parque Nacional bajo responsabilidad de la Autoridad Nacional del Ambiente,
De esta forma, se logra la recuperación del área, uno de los ejemplos más evidentes de lo que la acción del hombre puede hacer sobre la tierra, explicó a DíaaDía, Karina Rivera, administradora regional de la Anam en Herrera.
En Sarigua se han podido encontrar vestigios de culturas que habitaron este territorio hace aproximadamente 11 mil años. Se han encontrado vasijas, herramientas de caza y utensilios propios de los primeros habitantes de esta región del país, los cuales están a la vista de los visitantes.
La historia más reciente cuenta que en los años 60 y 70 se inició la deforestación del área, puesto que los habitantes de las comunidades a su alrededor querían contar con una playa cercana. Pero también era común la extracción de madera sin control, para estacones, leña y para la confección de carbón, actividades comunes en esa época.
La directora de la Anam explicó que debido a las características que tenía Sarigua, previo a su creación como área protegida, nubes de polvo se levantaban afectando grandes extensiones de terreno.
Según Rivera, hay hallazgos que indican que el polvo de Sarigua recorría distancias lejanas, llegando a encontrarse partículas del mismo en el cerro Canajagua.
Como paliativo a esta situación, se otorgaron en concesión dos mil hectáreas de terreno para el desarrollo de actividades acuícolas, como la cría de camarones en estanques. “El agua proveniente de esta actividad ayudó a mitigar las nubes de polvo que se levantaban y que afectaban a las comunidades vecinas”, dijo.
Las características del Parque Nacional Sarigua son únicas en el país. Llueve muy poco y el sol es siempre candente.
Estas características hacen su territorio propicio para el impulso de un proyecto de producción de energía a través de paneles solares, el cual está actualmente en fase de desarrollo. A través de este proyecto, explicó Rivera, se concesionaron 5 hectáreas de su terreno en los cuales se espera obtener unos 20 mil voltios diarios que serían incluidos en la red de distribución eléctrica nacional.
Experiencia ecológica
Visitar Sarigua es una experiencia diferente. Pueden realizarse caminatas acompañados por los guardaparques de Anam que permanecen en el área todos los días de la semana.
Es posible conocer las especies de fauna y flora propias de este ecosistema, como el mangle rojo, negro y salado. Abundan otras especies como el algodón, agallo, algarrobillo y la leucaena.
Juan Aguilar es ingeniero forestal y ha estado ligado a Sarigua desde su niñez. Conoce su territorio y cada una de las especies propias del mismo. Según explica, visitar Sarigua es una experiencia única, ya que en su área se pueden apreciar fenómenos difíciles de encontrar en otras regiones.
Aguilar describe a Sarigua como “un gran laboratorio al aire libre”. La temperatura durante el día puede elevarse hasta casi los 40°C, mientras que en las noches puede alcanzar 19°C. Llueve poco, los aguaceros pueden durar escasos 20 minutos y siempre ocurren después del mediodía.
En Sarigua podrá encontrar una casa de visitantes, en donde los guardaparques le brindarán toda la información necesaria para conocer más a fondo las características del lugar.
Esta sede será remodelada y ampliada para una mejor experiencia turística, buscando atraer cada vez más personas interesadas en conocer la gran labor de recuperación del territorio, según confirmó la directora de Anam en Herrera.
Unas 6 mil personas visitan Sarigua cada año, principalmente grupos de estudiantes de primaria y de carreras universitarias. Según Aguilar, cuando el parque aún conservaba características de desierto, el número de visitantes se duplicaba por la cantidad de personas interesadas en conocerlo.
Fuente: diaadia.com.pa